¿Cómo creamos una auditoría de marca en Comuniza?
Tenemos más de 10 años de experiencia y 800 proyectos de branding como consultora de marca. Como resultado de esta trayectoria, hemos creado auditorías de marca que han respondido a preguntas complejas de todo tipo de empresas y organizaciones, en múltiples sectores y ámbitos geográficos. No obstante, todas comparten una misma metodología de fondo y manera de pensar, que hemos ido perfeccionando a lo largo del tiempo.
Auditoría es hacer del dato acción. Y para ello es necesario plantear una serie de fases secuenciales que nos lleven de la duda a la certeza.
A continuación te explicamos cada una de las fases de nuestro proceso en detalle:
Análisis interno
La primera fase de inmersión y exploración busca conocer el mundo interno de la marca. Este es el punto de partida que emplearemos como referencia para añadir a posteriori más capas de análisis.
¿Qué elementos queremos conocer en el análisis interno?
- Los hitos históricos de la compañía
- Los significados que rodean la marca en la actualidad
- Su modelo de negocio
- Su oferta y gestión de portafolio
- Sus principales objetivos como organización
- Los atributos y rasgos que la caracterizan
- La personalidad y los arquetipos de marca que la definen
- Los valores y principios que sigue a la hora de actuar y tomar decisiones
- Los procesos y acciones que lleva a cabo en su día a día
- Su visión de futuro y su propósito
En este proceso es clave la colaboración activa tanto con el cliente como con el usuario. En el análisis interno realizamos diversas sesiones de trabajo para hallar esa información que nos aportará valor en el proceso, y que posteriormente deberemos contrastar con nuevos descubrimientos en fases sucesivas.
Análisis proyectado
Una vez encontremos estos primeros descubrimientos llega el momento de contrastarlos con lo que actualmente está proyectando la marca. Cada mensaje, cada imagen, cada acción genera una imagen y es imprescindible realizar un diagnóstico en detalle para entender la distancia que hay entre lo que somos y lo que queremos llegar a ser.
¿Qué aspectos nos interesan principalmente del análisis proyectado de marca?
- ¿Cuál es la propuesta de valor que comunica actualmente la marca?
- ¿Bajo qué relato la transmite? ¿Es un relato uniforme o hay varios?
- ¿Qué tono de voz emplea? ¿Cuáles son sus mensajes principales?
- ¿Cómo es su imaginario? ¿Cómo es su imagen de marca? ¿Qué imágenes, colores, formas…encontramos en su universo?
- ¿Cuál es el contexto o territorio desde el cual se expresa la marca a través de los elementos anteriormente identificados?
Análisis sectorial
Tras ubicar adecuadamente a la marca en su sentir y en su expresión llega el momento de echar un vistazo a la dimensión externa de la marca. El primer paso será analizar el sector, y para ello realizaremos diversas reflexiones:
- Análisis macro: indicadores que nos ayuden a ver el estado actual del sector. Porcentajes de crecimiento, variables clave, temáticas y aspectos a tener en cuenta que afectan a todos los actores inmersos en él. Incluida tu marca.
- Principales competidores: Aquellas marcas que compiten con nosotros por la preferencia del usuario. Marcas con un modelo de negocio u oferta similar, que tratan de establecerse en la referencia del sector. Es vital realizar un análisis de la competencia y detectar nuestra posición y la de ellos.
- Competidores indirectos o sustitutivos: Aquellas marcas que compiten con nosotros no tanto por producto específico sino por partida presupuestaria. Marcas sustitutivas que pueden amenazarnos según el momento o el lugar en el que se encuentre el usuario.
Referentes: Marcas de fuera de nuestro sector que, ya sea por lo que hacen o por cómo lo hacen, nos pueden aportar nuevas ideas para mejorar nuestro negocio e impulsar nuestra marca. - Tendencias: Micro y macro tendencias capaces de aportarnos relevancia de cara al usuario. Es conveniente analizar gran cantidad de fuentes de tendencias para seleccionar aquellas verdaderamente útiles para inspirar una nueva propuesta de valor. Los cambios en el mercado de marca existen y analizar nuevas tendencias de mercado es vital para adaptarse.
Análisis percibido
Por último llega el momento de prestar atención a la última variable de la auditoría de marca: el análisis de usuario, o análisis percibido.
El análisis percibido, como su propio nombre indica, analiza percepciones e ideas. Todo aquello que se encuentra en la mente del usuario al que nos queremos dirigir. Sus objetivos y metas, sus miedos, sus frustraciones, sus expectativas, sus opiniones.
Un espejo al que debemos mirarnos para encontrar el punto de encuentro con el mercado al que nos dirigimos. Con aquellas personas para las que trabajamos. El análisis percibido, como también ocurre con el interno, es eminentemente colaborativo. Así como en el análisis interno la clave es integrar al cliente, en el análisis percibido acogemos e invitamos al usuario a participar en diversas dinámicas.
¿Qué buscamos? Entender su experiencia actual para poder diseñar una nueva experiencia alrededor suyo.
¿Cómo lo hacemos?
- Con cuestionarios y entrevistas para conocer sus intereses, expectativas y rechazos
- Con talleres de definición de su experiencia actual
- Con talleres de definición de su perfil como usuario