No mucho. Dar las gracias no está condicionando nuestro mundo.
Tendríamos que enseñar en las escuelas en ser agradecidos, en los social networks tendríamos que añadir el icono “gracias”, y cuando hablas con Google o Alexa, tendría que ser más común decir, “gracias”. ¿Has probado? Google lo agradece.
Siendo un poco mas especifica falta una ciencia del gracias, del agradecer. En sociología y psicología se estudia el “prosocial behavior” e incluso hay un texto sobre la “sociologia del dar». Pero no hay sociologia del agradecer.
Imagina si se estudiara como hacer que la gente sea mas agradecida. Un gobierno hace una ley y en vez que oponerse las personas se juntan para decir “gracias, esta ley nos va perfecta”. Nos juntamos en manifestaciones para protestar, ¿por qué no nos juntamos para agradecer? El sentimiento que nos uniría sería mucho más placentero.
Las empresas “ofrecen” productos y servicios y nosotros agradecemos …¡pagando! ¿Es lo mejor que podemos hacer? Yo creo que no. Mí abuelo era medico en la pequeña ciudad donde nací en el norte de Italia y muchos de sus pacientes no podían pagar con dinero así que en casa a menudo llegaban cosas para comer y otros regalos hechos por los pacientes del “nonno”. Claramente recibir un conejo muerto no es igual que recibir 100 euros en términos de liquidez, pero a mis ojos de niña este regalo convertía mí abuelo en un héroe y los pacientes en amigos y no simplemente actores de una transacción.
Quizá exagero un poco pero creo que si practicásemos un poco más de agradecimiento cada día la calidad de nuestras interacciones (y más ahora que solo nos vemos por internet) subiría mucho.